Franco Colapinto volvió al ruedo después de tres semanas, en las que los pilotos de Fórmula 1 y sus equipos aprovecharon para tomarse unas merecidas vacaciones por el receso de verano europeo. El primer desafío que afrontó el joven piloto argentino tras el parate fue nada menos que el Gran Premio de Países Bajos.
En un fin de semana que comenzó con un noveno puesto en una de las prácticas y continuó con el 16° lugar en la Qualy, Colapinto afrontó la definición con la ilusión de dar batalla con el Alpine #43. En una carrera marcada por los accidentes de Ferrari, el triunfo de Piastri con Mc Laren, el abandono de Lando Norris cuando marchaba segundo y las órdenes de equipo de Alpine, Colapinto sacó a relucir todo su potencial y consiguió su mejor resultado de la temporada. Finalizó 11° y quedó a las puertas de los puntos, si no hubiera sido por una mala gestión de equipo que no ordenó que Gasly lo deje pasar cuando ya no tenía más neumáticos.
Tras varias salidas del Safety Car por distintos incidentes —situación que lo llevó a mostrar frustración—, Colapinto protagonizó grandes sobrepasos en las últimas vueltas y cruzó la bandera a cuadros en la 12° posición. Sin embargo, gracias a la penalidad que recibió Kimi Antonelli por el toque que provocó el accidente de Charles Leclerc, avanzó un lugar en el clasificador. Su compañero de equipo, Pierre Gasly, a pesar de haber estado dentro del Top 10, finalizó 17°.
El gran protagonista de la carrera fue Oscar Piastri. El australiano de McLaren dominó de punta a punta y, tras el abandono de su compañero Lando Norris, tomó una ventaja importante en la lucha por el campeonato. Con este triunfo se mantiene como líder con 309 puntos, mientras que Norris continúa segundo con 275. La sorpresa la dio Isack Hadjar, quien alcanzó su primer podio en Zandvoort al finalizar tercero con el Racing Bulls.
El siguiente desafío que afrontará Colapinto en la F1 tendrá lugar el próximo fin de semana cuando se lleve a cabo el Gran Premio de Italia en el circuito de Monza.
Fuente: Carburando.