En un contexto de desempeño mixto para el país, las ventas en los supermercados del Chaco registraron en julio una caída del 2,0% en términos reales respecto al mismo mes del año pasado, ubicando a la provincia entre las once jurisdicciones que cerraron el mes con números rojos. Así se desprende del último informe de la consultora Politikon Chaco, basado en datos del INDEC.

A nivel nacional, el sector supermercadista anotó un leve crecimiento del 1,0% interanual, marcando el séptimo mes consecutivo en alza. Sin embargo, esta cifra esconde una realidad compleja: al desestacionalizar los datos, se observa una caída del 2,1% respecto a junio, la cuarta consecutiva.

¿Qué compran y qué no los chaqueños?

El director de Politikon Chaco, Alejandro Pegoraro, explicó a NORTE que el fenómeno no se puede analizar sin mirar el comportamiento por rubros. «A nivel país, vemos una grieta en el consumo», señaló. «Mientras rubros como Carnes (+25,4%) y Alimentos Preparados (+13,1%) crecieron con fuerza, los productos de almacén, lácteos, limpieza y verdulería cayeron. Son estos últimos los bienes esenciales los que tiran para atrás, lo que refleja la presión sobre el bolsillo de las familias».

El Chaco en el mapa nacional: luces y sombras

El informe detalla que, en el acumulado de los primeros siete meses del año (enero-julio 2025), Chaco mantiene un saldo positivo del 2,8%. No obstante, la perspectiva a más largo plazo es menos alentadora: comparado con el mismo período de 2023, las ventas en la provincia acumulan una fuerte contracción del 17,9%.

«La situación de Chaco es similar a la de varias provincias del NEA y el NOA», analizó Pegoraro. «Mientras que distritos como Neuquén, Río Negro o el resto de la provincia de Buenos Aires crecen a un ritmo superior al 6%, en nuestra región cuesta mantener la tendencia positiva. Esto evidencia una recuperación económica despareja en el territorio nacional».

Las provincias vecinas

El panorama regional también es heterogéneo:

Formosa: también cayó en julio (-2,2%).
Corrientes: fue una de las excepciones positivas en la región, con un crecimiento del 2,4%.
Santa Fe: se mantuvo casi estable, con una mínima alza del 0,4%.

En el otro extremo del país, Neuquén lideró el crecimiento con un robusto 8,5%, seguido por Catamarca (6,7%) y Río Negro (6,6%). Las caídas más pronunciadas se observaron en Misiones (-10,0%) y Entre Ríos (-8,8%).

¿Hay motivos para ser optimismistas?

Pegoraro se mostró cauteloso: «El dato positivo de julio a nivel nacional es frágil. El hecho de que la mayoría de los rubros que caen sean los de consumo básico, y que la comparación contra 2023 siga siendo profundamente negativa para casi todas las provincias, incluido Chaco, nos indica que la recuperación del poder adquisitivo todavía es un camino largo».

Los números dejan en claro que, a pesar de algunos indicadores alentadores a nivel macro, el consumo interno en el Chaco y gran parte del norte argentino aún no encuentra un rumbo firme de crecimiento.

Fuente: Diario Norte

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